martes, 28 de julio de 2009

CÍRCULO CERRADO. 1ª PARTE



Ya sé el momento en que perdí la corona, lo he localizado, momento confuso en el que tapé mis ojos y no quise ver la realidad, decepcionante y dolorosa realidad.

1º ataque:


Cobarde y egoísta! Fue la primera vez que esas palabras salían de mi boca dirigidas a una persona que formase parte de mi vida. Creo que no conocía su significado en profundidad ni sus efectos arrolladores y bélicos sobre quien recibe su ataque.


Gran error por mi parte CONFIAR en quien se define como alma oscura, confiar en quien el egoísmo es fiel compañero, confiar en quien la cobardía es una sombra a sus espaldas, confiar en quien abandona, huye y se esconde….


Por lo tanto localizo el error, porque ya lloré una vez, sufrí y sentí abandono, sufrí el ataque de sus armas, de su egoísmo, de su cobardía…tan sólo por un día pero lo vi claramente y en ese momento la cobarde fui yo.


Me dejé engañar por un lobo con mirada de ángel, con palabras de plata, con mentiras de miel, su coraza era de seda pero ahora veo que su armadura es del más duro metal, de la más dura piedra que he conocido. Resbaló la seda y quedó su armadura, brillante, intacta, por donde no sale ni entra la luz.


Con su disfraz de rey pidió perdón a su reina y ésta despistada se lo dio.


2º ataque:


La cobardía y el egoísmo actuaron sin piedad, como en una estrategia militar perfecta para hacer el mayor daño posible. Y como en todas las guerras el malo huye respirando aliviado, pues su misión está cumplida.

EXCUSAS Y AUTOENGAÑO son las estrategias que estos personajillos disfrazados utilizan para camuflar sus armas (egoísmo, cobardía, duda, culpa, inseguridad, frustración…)


Princesas, futuras reinas y reinas ¡Aprended a reconocerlos! están por todas partes, cada uno con un disfrad diferente pero su esencia es la misma.


Y tened claro, muy claro, que todo aquel que no quiere trabajarse interiormente para superar sus defectos y mejorar sus carencias, quien no quiere actuar con buenos valores, con sinceridad, honestidad y respeto, quien no elige el camino correcto, el de la verdad, el natural…no lo hace porque no quiere!!


Sus propias excusas y mentiras le aliviarán a él y a algún amigo o conocido cercano donde busque apoyo, pero es ¡mentira! La elección correcta en nuestras acciones es posible, en este aspecto no hay ninguna duda y quien no avanza hacia las elecciones correctas es porque no quiere. Viven en un autoengaño y un autovictimismo que jamás les dejará ser felices, se nutren de ello. Pero sabed que es su libre elección y no podéis cambiarlo. Si hay mucha luz huyen, pues su propia oscuridad no les deja ver, pero no olvidéis que no quieren ver.


Es muy probable que ni sufran, que lo guarden todo bajo llave dentro de su armadura, lo escondan en lo más profundo y ¡nada más!


Me consta que alguno que ha conseguido vislumbrar algo de luz llora intensamente las consecuencias de sus actos, los sufre y se ve así mismo como un monstruo que hace daño gratuitamente a personas que sólo le han regalado su amor y verdad.


Pero que no os den pena!


No concedáis el perdón, si os lo piden, para aliviar sus conciencias, si aún la tienen…
Concedeos el perdón a vosotras, por haberos equivocado, confiado…pues un corazón bondadoso es susceptible de ataque. Aprended la lección sin dejar que los defectos, carencias, la oscuridad y elecciones erróneas de una persona oscura influyan en vuestra vida. Intentad evitar las barreras y secuelas que levantareis, no seáis como ellos, no os contagiéis. Perdonadlos, no por ellos, por vosotras, liberaos de esa carga para seguir avanzando, ellos a nivel humano e interno se quedan muy atrás…

Continúará…

domingo, 5 de julio de 2009

Estrellas y silencio




No habrá Venecia…
No habrá Marruecos…
No habrá teatro bajo las estrellas…
No habrá pinceles ni colores…
No habrá paseos de historia y arte…
No habrá sudor…
No habrá patitos recobrando vida…



Palabra a palabra, piedra a piedra derribó mi muralla.

Abandoné mi soledad, ahora regreso herida.

Confía…escuchaba…y confié.

Me hubiera ido a su lado. No me lo pidió, no se lo pedí.

Miedo.

Batalla perdida.

¡Entrad fantasmas! Regresad a protegerme, os abro la puerta.

“Noche” te acercas oscura. Ya te conozco.

“Día” espera paciente, volverá la sonrisa.
Estrellas y silencio.

Reconstruido corazón de Ganso, vuela…