"Si quieres cambiar el mundo comienza por cambiar tú y ya habrás comenzado a hacerlo"
Curso de vuelo para aspirante de sueños, Marta ligioiz.
Estas palabras son mi pequeño y humilde homenaje a todas esas personas que luchan para que todos vivamos en un mundo mejor. Son pequeñas acciones individuales que van creciendo con esfuerzo y valor. En concreto este homenaje es para aquellos que luchan por el planeta, sus árboles, sus ríos, sus animales, su diversidad, su riqueza, por los derechos humanos, de los niños...por el regalo de la vida y por el regalo que le pertenece a las futuras generaciones.
Casualmente han llegado a mi vida libros con información ecológica, con historias individuales y con información sobre la terrible situación del planeta. También libros llenos de esperanza y que transmiten fuerza y energía para comenzar a mejorar,a concienciarnos y a luchar por lo que realmente es importante.
No sé si alguien conoce la historia de once amigos preocupados por las pruebas nucleares. Se convirtieron en improvisados marineros dispuestos a impedir una explosión nuclear en el mar partiendo en un pesquero un 15 de Septiembre de 1971. Los detuvieron y las pruebas se realizaron. Pero aquello originó que los medios de comunicación sacaran sus reivindicaciones a la luz. Supuso el principio de un movimiento social que lucha por el medio ambiente. A los cinco años eran una organización internacionalo llamada Greepeace. En todos estos años han conseguido muchas de sus metas como moratoria internacional para la caza de ballenas, la prohibición en Europa de importación de pieles de bebé foca, cesa el mayor vertido de residuos tóxicos al Mediterráneo, se prohibe la explotación mineral petrolífera en la Antártida, comercialización de frigoríficos que no dañan el medio ambiente..............
Fueron llamados locos, aún lo son, muchos de sus objetivos todavía no se han cumplido pero siguen trabajando en ello. Para ayudar a detener el cambio climático, proteger la biodiversidad....fomentar al paz...
Los cambios siempre se generan tras la iniciativa de una o varias personas, provocando una onda expansiva.
De una forma parecida nació Amnistía Internacional. Peter Benenson, un abogado inglés reaccionó ante la condena a 8 años de carcel de dos jóvenes portugueses por hacer un brindis a la libertad en público. Su indignación le llevó a escribir una carta al periódico Le Monde, pidió colaboración para actuar. Una persona generó un movimiento que los demás escucharon y así después de más de 30 años, esta ONG ha recorrido el mundo en defensa de los derechos humanos, para erradicar la tortura y malos tratos, las ejecuciones o las desapariciones, la pena capital........
Son personas como nosotros, que se quejan un día, pero qeu comienzan una acción para solucionar sus quejas, se sienten valiosos en el planeta y tienen algo que aportar.
El último caso personal y que em ha emocionado profundametee s el de Julia Butterfly Hill que en 1977 subió hasta la copa de una Secuoya de 50 metros con la idea de permanecer allí un par de semanas para evitar su tala y la agresión y deforestación peligrosa de uan empresa estadounidense. durante dos años julia estuvo viviendo en el árbol, llamado Luna,, soportando tormetas, el acoso de al empresa y la visión del deterioro progresivo y brutal del bosque que la rodaba. Se convertiría en un símbolo universal del ecologismo. Recomiendo su libro "El legado de Luna"
Todo se resume a una cosa, el Amor.
Si solo una persona puede cambiar el mundo todos podemos hacerlo.
Mi mensaje principal es la frase que abre este escrito. La gran revolución comienza por un cambio personal, cada vez que insultas o discriminas estas en guerra. Cada vez que superas una diferencia y cada vez que das un abrazo estás creando al paz.
No creas que lo único que cambia el mundo es unirse a una ONG. Tus pequeñas acciones individuales, tu consciencia, tus prioridades, el respeto, el amor a lo que te rodea...es una onda expansiva, es una pieza del gran puzle.
Quizá la llamada a tu corazón, tu plan de vida no incluye subirse a una Secuoya ni dedicar tu vida a causas sociales concretas, eso no importa, Debes guiarte por tu corazón y empezar a vivir con pequeños pasos hacia un mundo mejor, con acciones quizás no tan valorables pero sí con la misma importancia, pues sin pequeños pasos no habría grandes metas.
Desde aquí mi gratitud a todas esas personas que luchan día a día por cambiar el mundo, por devolvernos el regalo de la vida, a esas personas cuyo plan de vida es cuidar y proteger nuestro planeta, para nosotros y nuestros hijos, nuestros nietos...Gracias. Intentaré hacer lo posible en mi camino para ayudaros en vuestro cometido y quien sabe, quizá algún día yo también me suba a una Secuoya.